sábado, 21 de marzo de 2009

Arte Egipcio


El arte egipcio es, indudablemente, la manifestación artística que más ha subyugado al hombre moderno.
La civilización egipcia no sólo creó una arquitectura, escultura y pintura de impresionante belleza, sino también toda una cultura que ha hecho soñar a investigadores, literatos y personas corrientes, donde se funde lo histórico, lo mítico y lo misterioso.
El arte egipcio es un arte que está muy relacionado con el medio en el que se desarrolla. Este medio influye en diferentes aspectos: por un lado el medio geográfico determina una cultura cerrada que hace un arte impermeable a influencias exteriores, que va a evolucionar poco y cuando lo va a hacer va a ser sobre sus propias formas debido a la falta de comunicación con el exterior.
Por otro lado, el medio va a determinar unos materiales que nos indican una despreocupación por la vida terrestre y un deseo de eternizar la moral del difunto y del dios, por lo que el arte muchas veces está en función de templos y tumbas. Esto está relacionado con los dos factores determinantes del arte que también vienen dados por el medio: la monarquía y la religión.
Así, el faraón (y los nobles) y los sacerdotes van a ser los principales clientes. Se trata de un arte aúlico y oficial, que se desarrolla en virtud de la religión fundamentalmente, y a ésta está vinculado el faraón. No es por tanto un arte autónomo.
El arte egipcio está siempre sometido a unas normas, por esto es muy semejante y monótono, tan homogéneo. Es un arte estereotipado en el que se valora más la precisión del acabado que la originalidad. Además, tienen un gran carácter simbólico y mágico.

Los artistas egipcios van a perder en líneas generales en el anonimato, aunque se conocen algunos artistas ya del Imperio Antiguo, aunque son más los que se conservan del Imperio Nuevo. De los artistas los más considerados son los arquitectos, que se relacionan con los clientes. Sin embargo, los pintores y escultores son considerados como simples artesanos.
Va a haber dos tipos de talleres: los talleres oficiales, que están en torno a los palacios y los templos y es donde se forman los grandes artistas y obras, y los talleres privados, destinados a clientes que no estuvieran relacionados ni con la monarquía ni con la religión. De éstos últimos se han conservado muy pocas obras, entre otros motivos debido a que utilizaban materiales más endebles que los talleres oficiales.
Templos Egipcios


El templo egipcio es un templo que en un principio no tiene nada que ver con los de otras culturas ya que no es un templo destinado a sacrificios cruentos ni es un lugar para rezar ni es un lugar abierto para todos.




El templo egipcio es un lugar para la divinidad y por lo tanto se puede considerar como "el gran palacio" de la divinidad. El faraón, los sacerdotes y algunos status de la sociedad son los únicos que tienen acceso a él, y generalmente de manera restringida.
Se conocen lugares de culto desde época predinástica pero no se han conservado y sólo se sabe de ellos por relieves y jeroglíficos del Imperio Antiguo y por tanto sólo se sabe del exterior, que parecen chozas o cabañas de adobe y madera. Hay tres tipos de templos según su estructura y su finalidad:
Templo solar, también llamado astral, del Imperio Antiguo.
Sólo se conservan restos y el templo de Neuserre (faraón de la V dinastía). Este templo se encuentra en Abusir, al sur de Giza.
Se trata de templos construidos para adorar al sol, a Ra, y por su identificación también al faraón. Esto justifica los dos elementos que aparecen: el obelisco y la barca solar. Están situadas en un lugar desértico, son templos abiertos y sólo tendrán una repercusión en el Imperio Nuevo en la época de Amenofis IV.



Templo de Neuserre

Consta de un pabellón en un valle que se comunicaba con el resto a través de una avenida cubierta y lleva a un segundo pabellón que es la construcción propiamente dicha del templo solar.
Se trata de un cerco amurallado que tiene un patio abierto en el que hay que destacar dos elementos fundamentales: el altar detrás del cual se encuentra el obelisco, que termina con el piramidión, una parte dorada que refleja mejor los rayos solares.
A la derecha en el patio hay una serie de edificios que son almacenes y para realizar algunas ceremonias. Al obelisco se llegaba desde un vestíbulo anterior al patio por un pasillo que había a la izquierda de este. Fuera del recinto hay restos de una construcción de piedra que sería la barca solar.



Templo funerario

Aparece en el Imperio Antiguo pero no tiene una estructura muy marcada, que sí se dará en el Imperio Nuevo, que seguirán un esquema muy característico que será el mismo que el de los templos divinos o clásicos.


Templo de la Reina Hatshepsut

Este templo se encuentra junto al monumento funerario de Mentuhotep, en Deir el Bahari. En cierta manera imitándolo pero mucho más complicado. Aunque es muy vistoso no desentona con el paisaje aunque seguramente tendría pintura y un paisaje más vegetal. No se trata de un templo funerario.
Es llamado emispeos debido a que tiene una parte que da al exterior y una parte excavada en la roca. Para llegar había una gran avenida franqueada por multitud de esfinges y rodeada de jardines. Hay tres plataformas superpuestas de estructura adintelada soportada por pilares a las que se accede a través de rampas. Hay capillas dedicadas a distintos dioses, las más importantes a Hathor, donde se conservan los pilares hathóricos más interesantes, y a Anubis. La última parte está excavada en la roca. Se aparta de la estructura clásica.Tenía una importantísima decoración escultórica, tanto en relieve como estatuaria. Fue construido por el arquitecto Senmut, que tuvo muchísima importancia, fue el encargado de la educación de los hijos de Hatshepsut y posiblemente fue incluso amante de la reina. Hatshepsut fue una reina de la XVIII dinastía que ocupó el trono como regente de su hijo Tutmés III, quién se ocupó de destrozar muchas de las obras de su madre. Pese a ser regente reinó como una farona por derecho propio y de la q se decía que gobernaba como un hombre, pro lo que muchas veces se la representaba así



El Rameseum

Fue mandado construir por el faraón Ramsés II, de la dinastía XIX, pero de él sólo se conservan algunas ruinas.
Era un gran recinto que fue muy expoliado y desde época muy temprana se empezaron a quitar piedras para otras construcciones.
Junto a él se han hallado restos de almacenes abovedados. En su construcción se utilizaron pilares osiriados y hay restos de un coloso derribado.



El Templo de Medinet Habu


El faraón Ramsés III (de la XX dinastía) quería hacer en este lugar un gran recinto religioso equiparable al de Karnak.
Sólo queda una parte del templo y restos del palacio de Ramsés II que había en una ciudad que se encontraba al lado del templo. Es posible, aunque no se sabe con certeza, que la cubierta de la sala hipóstila fuera abovedada. Queda un pilono con decoración y pilares osiriacos.


El gran Speos de Abu Simbel


Fue mandado construir por Ramsés II. Se trata de un speos que, estando excavado en la roca, tiene todos los elementos de un templo común. Tiene una fachada inclinada simulando los pilonos, delante de los cuales se encuentran los colosos, que representan al monarca. Son cuatro, dos delante de cada pilono, que se encuentran sedentes y son característicos de la escultura egipcia.
A sus pies se encuentran figurillas más pequeñas que representan a miembros de su familia (su madre, su esposa y sus hijos). Tanto la jerarquización por el tamaño y su situación, a los pies del monarca, les dan un gran carácter de sumisión.
En la base sobre la que se posan los colosos hay relieves alusivos al monarca. Entre los dos pilonos se encuentra una puerta terminada en gola y a un nivel más bajo, con una hornacina encima que alberga una estatua exenta de la divinidad a la que está dedicado el templo, Ra. Los pilonos terminan también en gola y están decorados con relieves de una hilera de monos babuinos saludando al sol. El interior del speos está formado como una sala hipóstila, llena de pilares osiriacos que honran a Ramsés.
Detrás de esta sala hay una puerta que da a un pasillo que lleva al sancta sanctorum, donde se encuentran estatuas de dioses y del faraón. Dos veces al año, el 21 de febrero y el 21 de octubre, el sol penetra en el interior de la sala fijándose en las estaturas de los dioses y del faraón. Es un templo que se conserva muy bien y en el que se han encontrado restos de pintura.
El pequeño Speos de Abu SimbelEs el templo de Nefertari, la mujer de Ramsés II. Es muy parecido: tiene una fachada inclinada simulando pilonos, con la puerta a un nivel más bajo. También hay estatuas, pero no tan monumentales como las del gran speos: miden aproximadamente 10 metros. Se trata de 6 figura de Nefertari y de Ramsés, de pie, que se encuentran tres a cada lado de la puerta, dos de Ramsés y una entremedias de Nefertari.
Ramsés aparece con los atributos del faraón, mientras que Nefertari lo hace con los de la diosa Hathor, a quién está dedicado el templo. Las figuras aparecen separadas en hornacinas y también hay en el inferior estatuas de sus hijos de menos tamaño.



Templo divino o clásico


Está dedicado a un Dios. Se le llama también clásico por su forma y estructura. En el Imperio Medio no estaba totalmente configurado y será característico del Imperio Nuevo. Los que mejor se conservan son los del periodo Grecorromano, pero antes eran iguales. Tiene una estructura que siempre va desde lo más visible, lo más abierto, hasta lo más oculto, lo más cerrado, lo más angosto, por lo que va cargado de un cierto misticismo y misterio.
Se construyen en piedra y está dentro de grandes recintos que están cercados por una muralla que suele ser de mampostería, adobe, ladrillo… Esto implica que las zonas alrededor del templo se hayan perdido porque se construyeron con peores materiales. Dentro de estos recintos se encuentra el templo, la vivienda de los sacerdotes, almacenes, graneros, casas de la vida y centros de cultura (para los escribas, escuelas y talleres donde se aprende y también donde se hacen esculturas…). A veces hay otras estancias con distintas funciones. De todo esto sólo se ha conservado el templo, que tiene una estructura muy clara aunque a veces son muy complejos porque los faraones van añadiendo partes.
El templo tiene una cierta simbología: la utilización de la piedra está en relación con la perennidad de los dioses. Los soportes se asientan sobre el suelo, que simboliza la tierra de Egipto, los soportes son la vegetación y la cubierta, que es adintelada y muchas veces pintada de azul con estrellas, es el cielo.



Partes principales partes del templo

una avenida de esfinges para llegar, que representan a los protectores del templo. Las esfinges están recostadas y tienen cuerpo de león y cara o del faraón o de carnero, la representación del dios Amón al que muchas veces están dedicados.
Después se encuentran los obeliscos, que son símbolos del sol, solían terminar en una parte dorada y estaban llenos de jeroglíficos referidos a leyendas de las hazañas del faraón que lo mandaba construir, tras los que están los pilonos, que son dos altas construcciones que dan acceso al interior ya que entre ellos está la puerta de entrada. Son altos, por lo que esconden el interior del templo, tienen forma de talud, terminan en gola y en ellos se colocaban los mástiles (todavía quedan restos de los huecos).
En su interior había unas escalinatas que llevaban a otros edificios y estancias. La puerta estaba a un nivel más bajo y era adintelada. Esto también tiene su simbología, ya que los pilonos representan las dos tierras de Egipto y la puerta es más baja para la línea del horizonte, la salida del sol, estaban orientados al este. Los pilonos siempre van a llevar relieves que casi siempre van a hacer alusión a las victorias del faraón. Una vez pasada la puerta nos encontramos un gran patio porticado, la sala hípetra, donde en muchas ocasiones había un gran altar y estatuas de monarcas.
En algunas ocasiones, la barca se encuentra en un pabellón de la sala hípetra, pero esto no es lo más frecuente. Tras esta sala se encontraba otra sala, la sala hipóstila, una sala columnaza con cubierta plana. Tras ella está el sancta sanctorum, la zona más privada y oculta, donde están la naos para la divinidad y la sala de la barca.
Estas salas se desarrollan longitudinalmente y van disminuyendo de altura, anchura y luminosidad. Esto tiene relación con la jerarquización de las salas. A veces en el recinto sagrado se encuentra un lago sagrado que en Karnak todavía se conserva y que es el símbolo del lugar de donde salió la figura de Ra y es donde los sacerdotes van a realizar las abluciones y demás ritos. En templos de la Baja Época también se puede encontrar una construcción normalmente delante o justo detrás de los pilonos llamada pabellón mamrisi, que es el lugar de nacimiento para que la diosa madre dé a luz a su hijo.
El pueblo tien acceso a la contmplación d las estatuas d los dioses en las procesions organizadas por los sacerdotes. El dios hace un recorrido por determinados lugares y es depositado en pequeñas capillas fuera del recinto sagrado donde el pueblo las veneraba. Estas procesiones son llamadas "la salida del dios" y se realizaban un número de veces al año, que dependía del nomos

Templo de Amónen Luxor

Fue mandado construir por el faraón Amenofis III sobre un antiguo santuario, y fue realizado por el arquitecto Amenhotep.
Está dedicado al dios Amón, aunque está en relación con su esposa Mut y su hijo Khons. Poseía cuatro colosos sedentes y otros dos de pie, pero sólo se han conservado dos. Tenía dos obeliscos, uno de los cuales se conserva en su lugar original mientras que el otro fue llevado a París por Napoleón. En su interior se encuentra actualmente una mezquita más tardía.
En Luxor se da un gran número de tipos de pilares distintos: lotiformes, monóstilas, pilares osiriacos (en los que sólo el pilar soporta el peso), etc.

Templo de Amón en Karnak

Estaba unido al templo de Luxor por una avenida y es más grande que este. Tiene un trazado muy irregular con una estructura trapezoidal y rodeado de una muralla de adobe que se ha perdido.
Fue construido por diferentes faraones y épocas, lo que provoca la existencia de sucesivos pilonos para separar cada zona. No se conserva la estructura longitudinal y hay otras estructuras (templo a Ramsés, lago sagrado…)

En la sala hipóstila había ventanas en el intercolumnio central, que es más ancho y más alto, que están cubiertas de piedra. Hay relieves decorando los muros y también en las columnas, no sólo jeroglíficos sino también figuras, todo ello relacionado con la divinidad. Hay un templito dedicado a Khons que conserva un muro cerrado y la puerta entre los pilonos con sus terminaciones en gola.



martes, 17 de marzo de 2009


Gastronomía

La comida egipcia es una deliciosa combinación de sabores, gracias a los distintos ingredientes que proceden de la gastronomía mediterránea, africana y árabe. Dos alimentos son básicos en los hábitos de los comensales egipcios, las aish, hogazas de pan consumida muy a menudo y cuya masa se prepara con distintas harinas (la que más fama tiene es la "aish baladi", preparada con harina más basta y oscura) y las fuul, judías gordas de color marrón que se aliñan con limón (las llamadas ful, judías blancas, se cocinan a fuego lento durante horas en un caldero de cobre). Las fuul se sirven como acompañamiento para todo tipo de platos: verduras, ensaladas, fiambres, y en albóndigas que reciben el nombre de felafel o bien especiadas, con yogurt, queso, ajos y huevos. También se toman en bocadillo aliñados con tahini y vegetales en vinagre y además, pueden ser la base del Ta'Miya que se come con los dedos.

Los egipcios toman tanto carne como pescado. Las carnes suelen ser de vaca, cordero o aves como el pavo, el pato, el pollo y el pichón. Los pescados, tanto de agua salada como dulce, son frescos y están bien preparados. Le aconsejamos probar las deliciosas gambas gigantes con salsa de ajo de Alejandría denominadas Gambari.

Como platos típicos de la gastronomía egipcia destacan el Mashi, arroz con carne que se acompaña con hojas de parra, tomates, berenjenas o pimientos verdes, los mezze, toda una gama de entrantes fríos de procedencia oriental que se sirven en numerosas escudillas de pequeño tamaño. Se trata de verdaderas delicatessen, entre las que se encuentran el tabbouleh, ensalada de perejil y sémola de trigo de sabor ácido, la kobeiba, carne, pescado y nueces, la baba ghannoush, puré de berenjenas con ajo, las kibbeh, albóndigas de carne de cordero frita y sémola de trigo, basterma, cecina ahumada, sambousek, empanadas de verdura, hummus bi tahina, garbanzos en puré con pasta de sésamo, wara annab, hojas de parra rellenas de distintos ingredientes y el betingan, rodajas de berenjena adobadas.

Otros platos típicos son el Koshari, capas superpuestas de macarrones, arroz y lentejas con salsa de tomate, el Fattah también lleva capas pero éstas son de pan seco empapado en caldo, arroz y carne aliñado con ajo y vinagre y cubierto con yogurt, nueces y pasas; la Moulouhiya, sopa de espinacas, el Hanan, pichones rellenos de granos de trigo verde o arroz, el shish kebab, brocheta de carne de cordero y la Kufta, rollos de carne picada de cordero a la brasa. Todos estos platos se sirven acompañados de pilau, arroz con verduras.

En cuanto a postres, y al igual que en la mayoría de los países árabes, son deliciosos. El preferido por los egipcios es el Om Ali, mezcla de pan o pasta con leche, nueces, coco y pasas que se toma caliente. Se distinguen, además, el aish es serail, hogaza de pan con miel ablandada con jarabe de azúcar, la baklava, masa rellena de nueces aromatizada con aguamiel o con una infusión de azahar y la kumafa, tallarines horneados con azúcar, miel y nueces. No deje de probarlos.

Bebidas

Las comidas se acompañan normalmente con agua, que debe ser mineral y es muy importante que la abran delante de usted, aunque también puede beberse cerveza como la local "Stella". También se encuentran cervezas de importación. Como curiosidad recuerde que la cerveza fue inventada en el Antiguo Egipto. Entre los vinos destacan el tinto Chateu Giniclis, una buena variedad de blancos y el rosado Rubi D'Egyte. No son de excelente calidad pero resultan aceptables.

Las bebidas típicas egipcias son el karkade, que procede de la flor del hibiscus y se puede tomar caliente o frío, el shai, té negro de fuerte sabor y la variedad conocida como shai nana servido con hojas de menta, el ahwa, café turco, los zumos de mango, guayaba, plátano, naranja, fresa, zanahoria, lima, tomate, azúcar de caña, granada y limón, entre otros, el tamarhindi, infusión hecha con la pulpa seca del tamarindo, el irssous, agua de regaliz, el erfa, bebida de canela que se sirve caliente y cubierta de nueces y el na na, de menta. Entre las bebidas alcohólicas destacan el ersoos, licor de fuertes sabor y olor, el zahib, una especie de orujo y el yasoon, con sabor a anís.

La Religión

La historia de Egipto es una versión religiosa, politeísta.
El egipcio divinizó las fuerzas de la naturaleza, por esta razón todos sus dioses reunían características humanas y animales. El ciclo anual de inundaciones y fertilización de la tierra que produce el Nilo fue un La Religión elemento central en sus creencias. En los últimos periodos, hasta la economía estuvo organizada alrededor de los templos.
En Egipto, la religión se divide claramente en la oficial del estado, de la que conocemos muchos detalles (la esfera funeraria, que también esta bien representada) y las practicas cotidianas, de la mayoría de la población que se alejaban notablemente del culto oficial.
La religión oficial tenia como figura central al Sol o astro rey, denominado Ra, Horus o Amón. El faraón (en teoría) se preocupaba de los dioses y cuidaba sus imágenes culticas; porque los que realmente se preocupaban de ellos eran los sacerdotes. Los dioses, por su parte, establecían su residencia en las imágenes y mostraban su favor al faraón y, por ende, a la humanidad.
Ni el hombre ni el faraón pueden "amar"a un dios, sino únicamente "respetarlo", "adorarlo"o "darle gracias". El "temor"significa la capacidad de levantarlo y "amor"la facultad de inspirarlo.
El fin del culto es mantener e intensificar la orden establecida del mundo. El culto lo practicaba toda una jerarquía de sacerdotes. Solo los sacerdotes podían entrar en el santuario, el pueblo no incumbía. El dios abandonaba el templo solo en algunas festividades, la imagen cultica se mantenía oculta en una capilla que era transportada sobre una barca simbólica, de manera que se conocía la presencia del dios, pero no se le veía. El culto oficial era algo irrelevante para las personas particulares.
Para satisfacer sus necesidades religiosas acudían a otros sitios como los templos principales y muchos santuarios locales en honor de las divinidades menores.
El pueblo acudía a esos santuarios, y en ellos oraban, presentaban sus ofrendas o depositaban sus consultas oraculares. Existían también centros de peregrinación, como abydos, y saqqara, la gente visitaba los santuarios cada día, o posiblemente rezaba en su casa.

Las actividades religiosas de ese tipo iban acompañadas de otras, muchas de las cuales fueron cayendo poco a poco. Entre los diversos tipos de objetos religiosos cabe citar, casi al azar, los amuletos con decretos divinos, bustos de los antepasados que se colocaban en las casas, y muchos otros objetos y formas de indumentarias que acompañaban el alumbramiento. Se desconocen ritos para los recién nacidos, solo algunos que se refieren a la circuncisión de los muchachos que según parece se hacia justo antes de la pubertad, para el matrimonio, o para facilitar el alumbramiento y a una purificación de la madre después de este.

En la vida religiosa también hubo animales a los que consideraban consagrados a dioses particulares, o que posiblemente eran adorados por si mismos como dioses, siendo enterrados con un ceremonial preciso. Los elegantes gatos que habitaron en Egipto eran muy parecidos a los de hoy (ya eran domésticos) el gato era un animal sagrado cualquiera que matase a un gato podía ser condenado a muerte.

Las especies asociadas a la divinidad eran momificadas y enterradas un solo ejemplar o bien todos sus miembros. El mas famoso de los animales era el toro Apis, consagrado a Ptah. Estos animales podían ser perros o chacales, gatos, mandriles, icneumones y carneros, distintos tipos de peces, serpientes y/o cocodrilos.


El sacerdocio

El sacerdocio no era una dedicación exclusiva. En la xvlll dinastía resurge como una clase, podían dedicarse al sacerdocio un oficiante, un especialista en ritos o sacerdote lector. Hubo una tendencia constante a que el hijo siguiera a su padre en el oficio sacerdotal, pero esto se vio frenado porque el faraón podía elegir al mejor para cada cargo y la sociedad egipcia fue evolucionando hacia una situación rígida. Llego a crear una especie de castas, llevaban una dieta especial, tenían su manera de vestir y de llevar la barba y la continencia sexual cuando se hallaban de servicio, aunque tal vez no en otras circunstancias. Recibían sus ingresos de los templos, de las ofrendas que eran depositadas ante el dios (estas debieron de constituir una pequeña proporción de los ingresos de los templos) Los templos llevaban adjunto talleres y escuelas.

Los sacerdotes profesionales y los burócratas, incluidos los militares, fueron las 2 categorías básicas de las personas letradas. La burocracia parece haber perdido su independencia y relieve en política. Así los sacerdotes se convirtieron en los depositarios de la cultura intelectual. La cultura de los templos del periodo grecorromano fue una cultura sacerdotal uno de cuyos rasgos mas destacados lo constituye la subestima del papel del faraón: en los periodos anteriores, los sacerdotes se presentaban ante la divinidad como delegados del faraón; ahora el soberano era el que se presentaba en virtud de su dignidad sacerdotal.

El mundo de los muertos

El destino de cada cual no estaba de modo alguno asegurado. La vida de ultratumba estaba llena de peligros, que por lo general había que superar recurriendo a medios mágicos. El punto de arranque de todas esas ideas era la tumba. El difunto podía continuar existiendo en la tumba y sus alrededores o podía viajar a través del mas allá. Su objetivo era identificarse con los dioses, y en particular con Osiris o incorporarse con algún espíritu transfigurado en el ciclo solar como un miembro más de la "barca de millones" la barca nunca se mostraba en toda su integridad.

Entre la muerte y la incorporación al mundo divino se celebraba un juicio (tema este menos importante para los faraones que para el resto de la humanidad), se representa muy a menudo, en las tumbas, en los papiros, ataúdes y mortajas.

Las escenas de juicio muestran a un monstruo femenino, llamado "devorador"o "devorador de los muertos", su función era engullir a quienes fracasaban en la prueba. Las escenas en las paredes de las tumbas eran partes de la provisión o viático para la vida después de la muerte, así lo relata el "Libro de los muertos"que además contenía una serie de normas para alcanzar la vida de ultratumba, en las que se contemplaba la manutención del cuerpo incorrupto. Esta creencia origina la compleja técnica de embalsamar los cadáveres: Momias y la construcción de grandes tumbas para que pudieran seguir viviendo en el más allá. Los enterramientos contenían gran variedad de bienes materiales, incluida en los 1° tiempos grandes cantidades de alimentos, estatuas que podían ser habituadas por el "alma" del difunto y la momia cuidadosamente envuelta, protegida por numerosos amuletos(hasta 400 figuras shawabty) colocada en un ataúd o un nido de ataúdes y que mágicamente era conducida a la vida mediante el rito de "la apertura de la boca".

Muchos de los objetos de las tumbas repetían el motivo del renacimiento en forma simbólica.
El énfasis en las creencias fue cambiando, pero pocas desaparecieron.


sábado, 14 de marzo de 2009



PIRÁMIDES





La pirámide es un monumento de carácter religioso presente en diversas civilizaciones muy alejadas entre sí, desde la India hasta América del Sur. La forma piramidal fue una evolución lógica en las construcciones, al constituir una estructura resistente —gracias a su amplia base— y muy elevada, que permitía una cercanía simbólica a los dioses



Las pirámides egipcias

Los egipcios tenían la firme creencia de que la vida seguía tras la muerte. Para que esta continuidad fuera posible se exigía la conservación física del difunto —al que retornaba el ka o espíritu huido tras la muerte—, que debía enterrarse acompañado de lo imprescindible para su bienestar en la otra vida. Lo primero se tradujo en la creación de avanzadas técnicas de embalsamamiento; lo segundo se solucionó inhumando el cadáver junto a completos y ricos ajuares funerarios. La relación entre’ supervivencia en el más allá y mantenimiento físico condujo a la creación de sólidos y cada vez más complejos recintos funerarios, destinados a la conservación, protección y culto, de los difuntos. El tamaño y la sofisticación de dichos recintos venían determinados por la posición social y económica del muerto. Fueron los faraones quienes erigieron las mayores y más extraordinarias tumbas.
En cuanto al simbolismo de la pirámide, se cree que deriva de una piedra de está forma, conservada en el templo de Heliópolis y llamada ben-ben, considerada el primer cúmulo de tierra que emergió de las aguas del caos cuando el dios solar creó el mundo. También aludía a la autoridad real, a la vez que, con su forma geométricamente perfecta, aportaba un evidente significado mágico y simbólico: era la representación más adecuada de la eternidad e indicaba el camino de ascenso de las almas privilegiadas hacia el dios-sol, con el que estaban destinadas a unirse.

Génesis de las pirámides

Durante las dinastías ¡ y 11(3100-2700 a. C.), las tumbas se situaban bajo mastabas, pirámides truncadas construidas con ladrillos cocidos al sol. La llegada del Imperio Antiguo o Menfita (2700-2185 a. C.) —dinastías III a VI—supuso para Egipto un importante florecimiento económico, social y artístico. Las técnicas y materiales constructivos experimentaron importantes mejoras; hacia 2660 a. C. se introdujo el uso de la piedra, procedente de las canteras de Assuán y de Tura, desde donde se transportaba aprovechando las crecidas del Nilo hasta los lugares cercanos a la zona de edificación.
La mayor y más antigua de todas las pirámides egipcias es el edificio central de la mastaba de Sakkara, reposo de los restos del faraón Zoser, primer gobernante de la III dinastía. Diseñada y erigida por el arquitecto lmhotep, fue construida hacia el año 2900 a. C. con bloques de piedra caliza. Sobre una base de 122 por 107 m, se alzan, una sobre otra, seis pirámides truncadas de dimensiones decrecientes; la cúspide de la superior alcanza casi 62 m.
Los primeros pasos hacia la pirámide romboidal de pendiente lisa se dieron en Dashur bajo el reinado de Esnefru (IV dinastía), en una construcción que, tal vez debido a razones económicas —los materiales del último tramo son de peor calidad—, sufrió un quiebro estructural en su mitad superior que modificó su forma y redujo su altura. Un nuevo avance se produjo en Meidum, donde Esnefru quiso transformar la pirámide escalonada del rey Huni (III dinastía) en una pirámide perfecta, objetivo que sólo consiguió parcialmente. Por último, Esnefru erigió al sur de Dashur una pirámide totalmente regular de 104 m de altura en la que también aparecen otros elementos desde entonces vinculados a los complejos piramidales: el templo alto o funerario —donde se celebraban los cultos y ofrendas periódicas en honor al difunto— y el templo del Valle o bajo —al parecer relacionado con el ritual del retorno del ka al cuerpo—, ambos unidos por una rampa o calzada ascendente


Las pirámides de Gízeh

Estos primeros intentos culminaron durante la IV dinastía (2600-2480 a. C) en un ‘grandioso conjunto funerario: la necrópolis de Gizeh. La pirámide más grande y más antigua del conjunto, iniciada en 2580 a. C., fue concebida como tumba para el faraón Kéops. Es de base cuadrada, cada lado mide 233 m y su altura alcanzó los 146 m (hoy mide 138). Ocupa una superficie de 48.000 m2. Está construida con dos millones y medio de bloques de piedra, con un peso medio de 2,5 toneladas cada uno, que fueron trasladados desde lejanas canteras. La entrada estaba en el norte, de ella. salía un corredor en rampa que desembocaba en una cámara falsa en la base de la construcción; luego en otra cámara, denominada de la reina; y, finalmente en la cámara real o gran cámara, a la que se accedía a través de un angosto pasillo.
Esta habitación ocupa el centro exacto de la pirámide; para que su realización no provocara el desplome de los sillares, los arquitectos idearon inteligentes soluciones constructivas: colocaron sobre este espacio cuatro o más lajas de piedra dispuestas horizontalmente y dos más en forma de cubierta a dos aguas, que servían para desviar el peso .y los fuertes empujes que se producen en este punto. La Habitación del Rey contiene un sarcófago, por lo que ha sido considerada como la morada definitiva del faraón, aunque el hecho de no haberse encontrado la momia del mismo, unido a las especiales características de la pirámide, han conducido a numerosas especulaciones; así, algunos autores consideran que Kéops no llegó a ser enterrado en la Gran Pirámide o que, tal vez, puedan existir más cámaras aún ocultas. De hecho, a mediados de 1980, varios equipos científicos detectaron vacíos estructurales en la pirámide y. localizaron una serie de almacenes en el lado oeste del corredor de la Cámara de la Reina, algunos rellenos de arena; podría tratarse de cámaras de descarga, parecidas a las ubicadas sobre la Cámara del Rey.
La pirámide de Kefrén es algo más pequeña, pero casi igual de alta que la anterior, debido a la mayor inclinación de sus paredes. Igual que la de su padre, estaba revestida de granito rosa y rematada con cubierta de oro. La de su hijo Micerino es mucho más modesta. Alrededor de las tres había un complejo religioso con templos. y pequeñas tumbas para los altos funcionarios de la corte. La entrada estaba guardada por la esfinge, inmensa escultura de piedra caliza de más de 20 m de altura, con cuerpo de león y cabeza humana. Se alza sobre una base de 70 m. Durante mucho tiempo su significación fue un enigma; actualmente se acepta que representa al rey Kefrén.


Otras pirámides

Durante las dinastías V y VI se produjo un resurgimiento de las creencias solares y un profundo cambio social y cultural. Se siguieron construyendo pirámides —de tamaño más reducido y menor calidad—, en las que se introdujeron nuevos elementos alejados de la austeridad de la época de Kéops, tal como se aprecia en los escasos res1 tos del conjunto de Sahure en Abusir, o en ¡os de lsesi o Unas, quienes construyeron su pirámide de nuevo en Sakkara.
En el Primer Periodo Intermedio (2200-2010 a. C.) —dinastías VII a XI—, Egipto se vio sumido en el caos y la anarquía. Los enterramientos bajo pirámide se abandonaron y muchas de ¡as tumbas del rico y poderoso Imperio Antiguo fueron expoliadas y destruidas. La reunificación del país y el retorno a un Estado centralizado durante el Imperio Nuevo (2050-1792 a. C.) —dinastía XII— inauguraron una etapa de estabilidad en la que se retomaron las antiguas tradiciones y, entre ellas, la construcción de pirámides, que, pese a poseer grandes proporciones y estar dotadas de dispositivos interiores muy complejos, casi auténticos laberintos, se caracterizaron por la pobreza de sus materiales.
Aunque las pirámides no fueron olvidadas del todo, con el transcurso de los siglos quedaron relegadas a meros vestigios del un pasado glorioso al que Egipto retomó sólo de manera esporádica. El último de estos períodos de auge sucedió durante el siglo VIIIa. C., con la invasión de los nubios procedentes del reino de Kush, en Sudán. Los kushitas entronizaron la XXV dinastía (760-657 a. C.), creadora de un poderoso reino que asimiló la historia y las tradiciones del país del Nilo: los «faraones negros» adoptaron su lengua, se convirtieron en devotos del dios-sol Amán Ra y recuperaron el enterramiento en pirámides, que erigieron en sus necrópolis de Kurru y Nuri, al norte del Sudán.





PIRÁMIDE DE SHAKARA






PIRÁMIDE DE KEOPS


PIRÁMIDE DE SAFRA



viernes, 13 de marzo de 2009


HISTORIA




La historia egipcia está intrínsecamente ligada al Nilo, corazón de la vida económica, social, política y religiosa desde que se produjo el primer asentamiento en la zona. Bajo el dominio de Menes, hace aproximadamente cinco mil años, se unificaron los estados independientes ubicados en las orillas del río, dando lugar a la primera dinastía monárquica estable.
Los faraones eran considerados divinidades y gobernaban una sociedad estratificada. En torno al año 2600 a.C., se construyó la primera pirámide y, durante los siguientes quinientos años, las técnicas constructivas fueron ganando en magnificencia. A lo largo de la IV dinastía, el poder faraónico alcanzó su máximo esplendor, cuando Keops, Kefrén y Micerinos mandaron erigir las pirámides de Gizeh. Posteriormente, durante las dinastías VI y VII, su poder se fue diluyendo y se originó una auténtica revolución social. Aparecieron pequeños principados, hecho que provocó el surgimiento de dos centros de poder desde los que se gobernaba simultáneamente: Heracleópolis (cerca de la actual Beni Suef), en el Egipto Medio, y Tebas (la actual Luxor), en el Alto Egipto.
No fue hasta la llegada del faraón Metuhotep II cuando se reunificaron las dos tierras del Alto y Medio Egipto. Durante el período comprendido entre los años 1550 y 1069 a.C., el imperio Nuevo prosperó bajo el mandato de faraones como Tutmosis I (el primer soberano enterrado en el valle de los Reyes), su hija Hatshepsut, una de las pocas mujeres que gobernaron, y Tutmosis III, que extendió el imperio hacia Asia occidental.
Amenofis IV rechazó la tradición religiosa y tomó el nombre de Akenatón en honor a Atón, el disco del sol naciente. Él y su esposa Nefertiti crearon una nueva capital llamada Tell el-Amaina, dedicada exclusivamente al nuevo dios. El yerno de Akenatón, Tutankamón, gobernó Egipto durante nueve años y murió siendo todavía un adolescente. A partir de entonces, una sucesión de generales, Ramsés I, II y III y Seti I, accedieron al poder y se inmortalizaron en monumentos y templos gigantescos. El imperio inició un nuevo período cuando el conquistador griego Alejandro Magno estableció una nueva capital y dinastía tras su llegada en el año 332 a.C.
Bajo el dominio de Tolomeo I, Alejandría se convirtió en una gran ciudad. Durante los trescientos años de dominación griega, se vivieron muchas rivalidades entre la clase noble, que derivó en multitud de exiliados y de asesinatos. Mientras tanto, una Roma en expansión empezó a interesarse por Egipto, y así se fue preparando el escenario para una de las historias folletinescas más antiguas y celebradas del mundo. El trágico final de sus protagonistas, Marco Antonio y Cleopatra, favoreció la anexión de Egipto al Imperio Romano.
Cuando se produjo la caída del Imperio, durante los siglos III y IV, el país del Nilo fue invadido por nubios, norteafricanos y persas. A pesar de estas incursiones, el imperio Bizantino heredó el poder de Roma y se mantuvo relativamente afianzado hasta la llegada los árabes, en el año 640 d.C. Éstos introdujeron el Islam y fundaron en Fustat (emplazamiento de la actual ciudad de El Cairo) la sede de un gobierno inestable. Los últimos en invadir Egipto fueron los fatimíes, que construyeron la ciudad de Al-Qahira (El Cairo); su dominio representó una época de prosperidad del país y de su capital.
Los cristianos de Europa occidental arrebataron al imperio fatimí gran parte de su territorio durante las cruzadas del siglo XI. Sin embargo, en el año 1187, los seljuks sirios enviaron un ejército, fortificaron El Cairo bajo las órdenes de Salá ad-Din y expulsaron a los cruzados de Jerusalén. Salá ad-Din alistó en sus filas a mamluks (mercenarios turcos), que acabaron derrocando su dinastía y dominaron Egipto durante dos siglos y medio. En 1517, el país cayó en manos de los turcos y debido a que la mayoría de los mamluks compartía estos orígenes, los sultanes otomanos de Constantinopla dejaron, en gran parte, el gobierno egipcio en sus manos y se limitaron a recaudar impuestos. Esta situación se mantuvo hasta que Napoleón ocupó el país en el año 1798. El emperador francés fue expulsado por los británicos en 1801, que a su vez lo fueron por Mohamed Alí, un teniente del contingente albanés del ejército otomano. En 1869, Said Pasha, nieto de Alí, inauguró el Canal de Suez.
La paralización de la deuda nacional permitió que británicos y franceses se instalaran en Egipto en 1897; de ese modo, los primeros pusieron fin a la soberanía que ejercía Turquía sobre el país. Durante la Primera Guerra Mundial, Egipto luchó con los aliados y, poco después, los británicos permitieron la formación de un partido político nacional, el Wafd. El rey Fuad I fue elegido representante de la monarquía constitucional y, durante los treinta años siguientes, británicos, monárquicos y militantes del Wafd compitieron por hacerse con el poder. Tras la Segunda Guerra Mundial, siete países árabes, fundaron la Liga Árabe. Sin embargo, en Egipto la guerra había dejado al país sumido en la ruina; además, su derrota en la guerra de 1948 contra Israel hizo que el caos fuera aún mayor. En 1952, un grupo de oficiales disidentes, dirigidos por el coronel Gamal Abdel Nasser, llevaron a cabo un golpe de estado incruento. Ni los británicos ni los franceses asumieron la posibilidad de perder el control del país, así que lo invadieron. Estados Unidos y la Unión Soviética se unieron a los cascos azules que Naciones Unidas había desplegado en la zona e insistieron en que la invasión tenía que finalizar. Nasser consiguió la independencia y se convirtió en un héroe nacional, aclamado en todo el mundo árabe.
A finales de la década de 1950, Nasser realizó un intento de unificación entre Egipto, Siria, Yemen y, más tarde, Irak, haciendo hincapié en la unidad árabe y excluyendo a Israel. Tras meses de crecientes tensiones entre Egipto e Israel, el estado judío terminó por lanzar un ataque contra el país egipcio el 5 de junio de 1967; se inició así la Guerra de los Seis Días, en la que Israel destruyó las fuerzas aéreas egipcias, conquistó la península del Sinaí y cerró el Canal de Suez.
Anwar el-Sadat, vicepresidente del gobierno de Nasser, le sucedió en su cargo a la muerte de éste, en 1970, e inició mejoras en las relaciones con Occidente. El 6 de octubre de 1973 Sadat lanzó un ataque sorpresa sobre la zona de la península del Sinaí, ocupada por los israelíes; aunque finalmente perdió la guerra, aseguró la integridad de la costa este del Canal de Suez durante las negociaciones del alto el fuego. En 1977, Sadat comenzó las negociaciones de paz con Israel, que culminaron dos años más tarde con los acuerdos de Camp David. Israel accedió a retirarse del Sinaí, y Egipto reconoció oficialmente su existencia. Muchos miembros del mundo árabe se sintieron traicionados por Sadat, que acabó siendo asesinado el 6 de octubre de 1981.
Hosni Mubárak, vicepresidente de Sadat, juró el cargo y ha sido desde entonces el dirigente del país. Mubárak ha sorprendido a muchos con sus hábiles estrategias políticas en la problemática región, y ha mejorado las relaciones con Israel y con otros países árabes. El resurgimiento del integrismo religioso en el mundo árabe, ha supuesto múltiples dificultades para Mubárak, quien ha sufrido numerosos atentados contra su vida. Durante la Guerra del Golfo, envió 35.000 soldados a luchar contra Irak; aunque la guerra fue considerada un ejemplo del imperialismo occidental en el mundo árabe, el compromiso de Egipto tuvo como resultado la mejora de sus relaciones con Occidente.
En 1992, los fundamentalistas islámicos iniciaron una campaña de violencia e intimidación contra los turistas y las fuerzas de seguridad egipcias. Los años centrales de la década de 1990 se caracterizaron por las tensiones con Sudán a causa de la zona de Halaib. En 1994, se produjeron graves inundaciones que, sumadas a los persistentes conflictos protagonizados por los integristas, culminaron en el intento de asesinato del presidente Mubárak en el año 1995. En 1997, la matanza de más de setenta personas -la mayoría turistas- a manos de fundamentalistas islámicos, conmocionó a la opinión pública egipcia y provocó que miles de personas de todo el mundo se replantearan su destino de vacaciones. Por el momento, Egipto se mantiene relativamente estable, con una baja tasa de desempleo, índices crecientes de alfabetización y un incremento de la privatización en su economía.
En 1999 el presidente Hosni Mubarak gan por cuarta vez las elecciones. Contina con su poltica pro-occidental, a pesar de las presiones de algunos grupos fundamentalistas. A finales del 2000 firm un acuerdo de un billn de dlares para construir un gasoducto y abastecer de gas a Siria y Lbano.

sábado, 7 de marzo de 2009

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Situación geográfica




La República Árabe de Egipto es un país de África, situado en su extremo nordeste, e incluye la península del Sinaí (que pertenece al continente asiático). Recostado sobre el Mar Mediterraneo y el Mar Rojo. Limita al oeste con Libia, al sur con Sudán, al norte con el Mediterráneo y al este con el mar Rojo e Israel


La mayoría de la población se asienta en el Delta y una estrecha franja fértil a lo largo del valle del río Nilo; la mayor parte de su superficie la integra el desierto del Sahara, sólo habitado en torno a los oasis. Su capital es El Cairo (القاهرة).Su territorio está ocupado en su inmensa mayoría por el desierto del Sahara que es atravesado por un único río, el Nilo, que riega la única tierra fértil del país y que ha sido la principal fuente de riqueza que ha permitido el desarrollo de imperios, culturas y civilizaciones a lo largo de la historia de Egipto. Desemboca en el Mediterráneo formando un delta de unos 200 Km de extensión en dirección norte-sur y entre Alejandría y Damieta en dirección este-oeste.El clima es desértico en la mayoría del territorio, con escasez de lluvias (aunque en los últimos años la humedad ha aumentado considerablemente en El Cairo), noches frías y días muy calurosos. En la costa norte, a lo largo del Delta, es de tipo mediterráneo, con una media de lluvia de 18 mm.Dado lo inhóspito del territorio la población se sitúa principalmente a las orillas del Nilo aunque también adquieren una cierta relevancia algunos núcleos ubicados en las costas del Mediterraneo y del mar Rojo.En Egipto se encuentra el canal de Suez, que conecta el mar Mediterráneo con el Rojo, y separa la parte principal del territorio egipcio de la Península del Sinaí, que limita al este con Israel.El gobierno egipcio mantiene 21 Parques Naturales con una superficie total de 53.000 Km², el 5% del territorio nacional. El mayor de ellos, el Parque Nacional de Elba, al sur, con distintos ecosistemas: manglares del Mar Rojo, 22 islas, arrecifes de coral, dunas costeras, pantanos salados costeros, llanuras costeras desérticas y la zona de montañas: Jabal Elba de 1437 m de altitud, Jabal Ebruq y Al Daeeb.





Mitología





Los egipcios adoraban dioses con cabeza de animal o con figura humana; incluso los imaginaban en forma de planta. Su religión no era homogénea puesto que bajo la forma de numerosos dioses podía ser venerado un mismo principio religioso. Resulta imposible ordenar las divinidades egipcias en categorías precisas. Dos son las razones principales: la complejidad de las ideas religiosas en Egipto y el largo período de tiempo en el que se desarrollaron.







AMÓN




Dios principal de la ciudad de Tebas. En su origen pudo ser un dios de los vientos, y, como tal, era el proctector de los navegantes. Su nombre significa "el oculto". Acabo fusionandose con el dios Sol, recibiendo el nombre de Amón-Rá. Se representa bajo aspecto humano, y con un tocado consistente en una corona de dos grandes plumas verticales juntas.








ANUBIS




Dios que presidía las momificaciones y guardian habitual de las necrópolis. Se representaba como un chacal negro o como un hombre con cabeza de chacal o de perro. Guíaba el alma del difunto en el más allá. Protegía el cuerpo de Osiris durante, y después, de que éste hubiera sido embalsamado. Luego sería integrado en la religión de Osiris, siendo entonces hijo de Neftis





ISIS



Diosa que personifíca el trono. Era llamada "madre de los dioses". Fue, sinduda la más popular de las diosas egipcias. En el cicl de Osiris, Isis tiene el papel de esposa del dios, y es madre de Horus. Modelo para esposas y madres. Ella fue quien reconstruyó con extraños procedimientos el cadáver de su esposo Osiris, y procreó, con él a Horus. Protegió a su hijo Horus con uñas y dientes de las agresiones de su tio Set. Era el símbolo de la semilla, crecimiento y seguridad de la vida. Cuando Osiris se solarizó, Isis pasó a ser madre y esposa del Sol. Como madre de las estrellas simbolizó el cielo de la noche.




OSIRIS



Dios muerto y dios de los muertos.De la unión de Gueb, la tierra, y Nut, el cielo, nacieron cuatro dioses: Osiris, Isis, Set y Neftis. Osiris e Isis ya se amaban en el vientre de su madre. Osiris tenía derecho a heredar el reinado de su padre sobre la tierra. Pero Set, celoso, ideó un plan para acabar con Osiris. Con 72 conspiradores más, contruyó una caja de la medida exacta de Osiris. Set invitó a Osiris a un banquete y prometió regalar la caja a aquel que cupiera exactamente en ella. Una vez que Osiris se metió dentro, taparon la caja y la echaron al río, que la llevó hasta la costa de Fenicia. Allí se incrustó en una planta hasta formar parte del tallo. Isis desconsolada parte en busca de su esposa hasta Fenicia. Después de largas aventuras consigue regresar a Egipto con la caja, que escondió entre matorrales de papiro. Pero Set la descubrió y corto el cuerpo de Osiris, en catorce pedazos, que esparció por Egipto. Isis ayudada por su hermana Neftis encuentra todos los trozos excepto el falo. Gracias a sus poderes mágicos y a la ayuda de Anubis, lo embalsamó, haciendo de Osiris la primera momia de Egipto. Convertida en pájaro, consiguió que Osiris la fecundara y de esta unión nació Horus. Este dios también forma parte del panteon egipcio. Se le representa mumiforme, cetro y látigo, corona blanca con plumas y cuernos. Dios muriente de la vegetación; gobierna el mundo de los muertos a quienes puede otorgar la vida eterna a su lado.








Dios solar de Egipto. Rá es uno de los nombres del sol. Cuando desaparece hacía el oeste es Atón , el anciano encorvado esperando en el más alla por los muertos que se calientan con sus rayos. Cuando vuelve a la vida por la mañana en el este, lo hace en forma de escarabajo, Jepri. Durante el día ilumina la tierra en forma de halcón (Rá).








TOT




El dios de la escritura, de las bibliotecas, de la lengua y el señor de las palabras divinas. Representaba las matemátcias, la astronomía y las ciencias en general. Era por ello símbolo de sabiduría y señor de los discursos convincentes, de la astucia y de la magia. Tenía dos formas de representación animal: el babuino y el ibis. Es poco frecuente la representacion de Tot con cuerpo humano y cabeza de babuino, pero por el contrario son numerosas con cuerpo humano y cabeza de ibis, casi siempre con material de escritorio. Tot era abogado y dios de las leyes; estuvo muy ligado a la diosa Maat como representante de la verdad y la justicia. Tot se servía de la astucia y la magia en los casos difíciles. Ocupaba una posición importante en el tribunal divino.




SOBEK


Dios-cocodrilo. Es mencionado en el texto de las pirámides como hijo de Neit. Se le creía emergido de las aguas del caos en la creación del mundo. Era "señor de las aguas", temible por su voracidad. Eliminaba los enemigos que habitaban en los medios acuáticos. Es representado cocodrilo y como hombre con cabeza de cocodrilo.










NEFERTEM



Tercer dios en la tríada de Menfis, junto a Ptah y Sacmis aunque su lugar solía ser ocupado con frecuencia con Inhotep. Como dios de la naturaleza representa el calor del sol naciente. En el Libro de los Muertos parece consistir en garantizar la continuidad de la vida en el mundo venidero, pero no se le menciona muy frecuentemente. Aparece representado como un hombre con un loto que surge de su cabeza, flor de la que nació.







SACMIS



Se presesentaba a esta diosa como leona, o como mujer con cabeza de leona. Era hija del dios ; llevaba el disco solar y el úreo sobre la cabeza, y se le consideraba una manifestación del ojo de Rá. Simboliza la energía destructora del sol, las llamas con que aniquilaba a los enemigos; era la temible diosa de la guerra. Causaba espanto en este mundo y en el más allá, donde Set y la horrible serpiente Apofis sucumbían ante ella. Su nombre egipcio era Sejmet, que significa "la poderosa". Esta diosa atacó despiadadamente a los humanos, pero Rá quiso impedir que los aniquilara. Sacmis fue engañada al ofrecérsele 7.000 vasijas de cerveza mezclada con un tinte rojo. La diosa, creyendo que era sangre, bebió y se embriagó, y la raza humana logró sobrevivir.






SATIS

Una de las diosas de la tríada elefantina. Era la esposa de Cnum, quien con su otra esposa, Anukit, formaba la tríada. Existen referencias a ella muy pintorescas, como la arquera que dispara la corriente (es decir, la catarata) derecha y veloz como una flecha. Poco conocemos de ella pero en la isla de Sehel se han encontrado restos de un templo dedicado a las dos diosas. Aparece en algunos textos como hija de y también como una variante de Isis. Se la representa con el tocado del buitre y con la corona del Alto Egipto con los cuernos de vaca.








SHU
Hijo de y Hathor, aunque una leyenda posterior afirma que Rá dió lugar a Tefnut sin ayuda de ninguna diosa. Como dios de la naturaleza puede decirse que es una personificación de la atmósfera que divide al cielo (Nut) de la tierra (Gueb). Con frecuencia figura con los brazos en alto, sujetando a Nut estrellada, mientras Gueb yace debajo. Shu es representado como un hombre, con su símbolo, la pluma en lo alto de la cabeza. A menudo es asociado junto con Tefnut con dos leones





JONSU

Jonsu es un dios cuyas raíces se hunden en el inicio de la historia egipcia. Jonsu era la representación de la placenta real, como símbolo lunar. En algunos textos de las pirámides Jonsu aparece como un dios sanguinario que ayuda al faraón en la caza y muerte de algunas divinidades para que el soberano pueda alimentarse de ellas y obtener su poder. Depende del lugar de adoración cambia su representación gráfica. El aspecto momiforme lo tomaba del dios Ptah. Del dios Horus asumia a veces la cabeza de halcón, y el flagelo y el cayado, como símbolos propios del faraón. La coleta de la juventud hacía clara referencia a uno de sus aspectos como un Jonsu niño. En sus manos llevaba un cetro formado por el pilar Dyed, símbolo de Osiris. Sobre la cabeza llevaba un disco lunar, así como otro símbolo de la luna creciente.



GUEB



La tierra personificada como dios. Era hijo de Shu, esposo de Nut, el cielo, y padre de Osiris, Set, Isis y Neftis. Su símbolo es el ganso y se le representa con forma humana y este ave sobre la cabeza. Recibe el nombre de "el gran cacareador" y algunos creyeron que había dejado el huevo del que salieron la tierra y todas las cosas. en textos de las últimas épocas "la espalda de Gueb" era un nombre común para referirse a la tierra.





AMÁN


Nombre egipcio del normalmente denominado "devorador". Criatura compuesta, parte leona, parte hipopótamo, parte cocodrilo, suele representanda sentada. Figura en las pinturas del juicio ante Osiris del Libro de los Muertos y en los frescos de Deir el-Medina. Era conocida como "la que destruye los malvados" y se creía que su función consistía en devorar a aquellos que no podían superar el juicio.







NUT


Uno de los títulos de Nut era "la grande que da el nacimiento a los dioses". De acuerdo con un mito, el dios Atón había creado el mundo a partir de sus fluidos internos. De esta forma surgieron los primeros dioses: Shu, el aire, y Rfenis, la humedad. Estos dioses procrearon a Gueb, la tierra, y Nut, el cielo. Nut también aparece en el panteón egipcio como la diosa creadora del universo físico y como la reguladora de los movimientos de los astros. Se la representa como bóveda celeste en forma de una mujer inclinada sobre la Tierra apoyándose en ella con los pies y las manos. Se creía que por la noche engullía al Sol y lo hacía renacer cada manaña.